Nombre: Javiera Silva.
Profesora: Lorena Garrido.
Modulo: Orientaciones Curriculares en el Nivel Inicial.
Introducción
Las bases curriculares de la educación parvularia, brindan oportunidades para ser adaptadas a las diferentes modalidades y programas y a las diferentes realidades en que se realizan, respetando el rol de la educadora de párvulos y el de la familia como primera educadora de sus hijos. Estas proponen un marco orientador para la educación de los niños de entre 84 días hasta los seis años o su ingreso a la educación básica.
En el siguiente informe se realiza un análisis en relacion a las bases curriculares, pero en especial a sus componentes estructurales, definiéndolos según las propias bases y apoyándome en los cuadernillos de reflexión pedagógica que el ministerio de educación nos brinda.
Desarrollo
Las bases curriculares de la educación parvularia se enmarcan en principios y valores entre los que se inspiran principalmente en la declaración universal de los derechos humanos y la convención de los derechos del niño. Nos presenta el rol de la educadora de párvulos como formadora y modelo de referencia para los niños y niñas, sin dejar de lado la importante labor que realiza la familia en el proceso de educación de sus hijos, ya que es la primera educadora de sus hijos, en donde los niños encuentran sus significados más básicos.
Uno de los objetivos de la educación parvularia es el de favorecer aprendizajes oportunos, pertinentes y con sentido para los niños, que fortalezcan su disposición por aprender en forma activa, creativa y permanente; logrando así un mejor avance en los ámbitos de formación personal y social, la comunicación y la relacion con el medio natural y cultural, para todo esto es fundamental promover el bienestar integral del niño, potenciar la participación de la familia, propiciar un trabajo en conjunto con la comunidad, etc.
Las bases curriculares cuentan con componentes estructurales. Entre los que podemos encontrar:
· Los Ámbitos de experiencia para el aprendizaje, que son tres: formación personal y social, comunicación y relación con el medio natural y cultural. Estos organizan el conjunto de las oportunidades que el currículo parvulario debe considerar en lo sustancial.
Estos tres ámbitos son campos fundamentales de experiencias para toda etapa de la vida humana, a nivel de la educación parvularia adquieren una mayor relevancia dado que es el periodo en el cual se inician y establecen las bases del comportamiento humano y sus primeros aprendizajes.
Formación personal y social: la formación personal y social es un proceso permanente en toda persona que involucra diversas dimensiones interdependientes. Estas comprenden áreas tan importantes como el desarrollo y la valoración del si mismo, la autonomía, la identidad y la convivencia con otros, la pertenencia a una comunidad y a una cultura, la formación valórica. Esta formación se construye sobre la seguridad y confianza básica que comienzan a consolidarse desde el nacimiento, y que dependen en gran medida de la calidad de los vínculos afectivos que se establecen con los padres, la familia y otros adultos que son significativos en la vida de los niños y niñas. La importancia de este ámbito radica en que estamos formando personas que puedan tener autonomía, y lleguen a ser personas independientes con valores y con una identidad propia, personas que puedan desenvolverse de una forma adecuada en la sociedad en la que viven.
Comunicación: la comunicación es el proceso central mediante el cual el niño y la niña desde los primeros años de vida intercambian y construyen significados con los otros. La interacción con el medio, a través de los diferentes instrumentos de comunicación, permite exteriorizar las vivencias emocionales, acceder a los contenidos culturales, producir mensajes y ampliar la comprensión de la realidad. La comunicación tiene diversas formas de manifestarse dentro de las cuales se involucran las capacidades de producir recibir y comprender mensajes, adquiriendo especial significado en el proceso de aprendizaje de los primeros años, ya que ayuda a potenciar las relaciones que los niños establecen consigo mismos, con los demás y con los distintos ambientes en los que participan. La importancia de este ámbito radica en que vivimos en sociedad, somos personas que siempre vamos a estar en contacto con otras personas, lo que hace que la comunicación sea una necesidad, para poder convivir de una forma sana ya que es de vital importancia el poder comunicarnos de una forma adecuada para poder comprender al otro y que el otro nos comprenda.
Relación con el medio natural y cultural: la relación que el niño establece con el medio natural y cultural se caracteriza por ser una relación activa, permanente y de reciproca influencia, es una fuente de constante aprendizaje. Es importante que los niños y niñas logren identificar los distintos elementos del medio, puedan descubrir y comprender las relaciones entre los diferentes objetos, fenómenos y hechos, para explicarse y actuar creativamente distinguiendo el medio natural del cultural. La importancia de este ámbito radica en que el medio natural y cultural es lo que nos rodea, es algo con lo que estamos obligados a convivir somos dependiente de este como este es dependiente de nosotros, por esto es de vital importancia que los niños conozcan su entorno para generar en ellos acciones de respeto y cuidado hacia el medio.
· Los Núcleos de aprendizaje son ocho y corresponden a focos de experiencias y aprendizajes al interior de cada ámbito, estos núcleos representan ejes en torno a los cuales se integran y articulan un conjunto determinado de aprendizajes esperados. Los núcleos constituyen los énfasis centrales que deben ser favorecidos por la educación parvularia en cada ámbito. Cada núcleo contiene un objetivo general en el cual se describe que capacidad de la niña y el niño se espera potenciar.
Dentro del ámbito de formación personal y social encontramos los siguientes núcleos:
-Autonomía: se refiere a la adquisición de una progresiva capacidad del niño para valerse por si mismo en los distintos planos de su actuar, pensar y sentir. Ello posibilita gradualmente su iniciativa e independencia para escoger, opinar, proponer, decidir y contribuir, junto con el asumir gradualmente responsabilidad por sus actos ante si y los demás. Estas capacidades se adquieren con el apoyo de los padres y de sus educadores.
Esta dimensión hace referencia también al conocimiento, valoración y control que los niños van adquiriendo de si mismos y la capacidad de utilizar los recursos personales de los que dispongan en cada etapa. Las interacciones de los niños y niñas con el medio, el creciente control motor, la constatación de sus posibilidades y limitaciones, el proceso de diferenciación de los otros y la cada vez mayor independencia de los adultos, son aspectos fundamentales para el logro de una mayor autonomía.
El espacio físico también es un factor muy importante en la generación de la autonomía para esto es necesario resguardar algunas condiciones que favorecen la autonomía como por ejemplo: la flexibilidad; de manera que vaya cambiando con el tiempo, integrando la participación de los niños en estos cambios, la funcionalidad; que ofrezca a los niños posibilidades de realizar diferentes actividades, la libertad; favorecer un aprendizaje donde los niños puedan expresarse libremente y puedan escoger las actividades que quieran realizar.
-Identidad: se refiere a la gradual toma de consciencia de la niña y el niño de sus características y atributos personales, los que descubren y reconocen una vez logrado el proceso de diferenciación de los otros. Esto les permite identificarse como una persona única, valiosas con características e intereses propios.
Se relaciona con aquellos aprendizajes esenciales para el ser humano que se relacionan con la toma de conciencia de si mismo y que en la infancia se orientan al descubrimiento de las características y atributos personales más representativos.
El desarrollo de la identidad de las personas, depende en gran medida de las percepciones que los adultos tengan de la infancia; en caso de ser positivas y le den importancia a la calidad de sus interacciones con los niños y las niñas desde que nacen, influirán favorablemente en la formación personal armónica y sana de ellos. En este sentido es de gran relevancia que los adultos reconozcan que los párvulos nacen con un repertorio de conductas sensoriales y con capacidades a desarrollar, es decir, que poseen fortalezas con las cuales pueden construir activamente, identidad, autonomía y sentido de pertenencia, aprendizajes necesarios para una convivencia social armónica saludable y fundada en valores.
-Convivencia: se refiere al establecimiento de relaciones interpersonales y formas de participación y contribución con las distintas personas con las que los niños y niñas comparten desde las mas cercanas y significativas hasta las mas lejanas, regulándose por normas y valores socialmente compartidos.
El convivir o vivir con, es un proceso de carácter multidireccional que dura toda la vida y que es necesario aprender desde el momento del nacimiento. El convivir tiene relación con la socialización, ya que es en este proceso donde las personas van adquiriendo formas de actuar y pensar y van desarrollando maneras de sentir que les permiten desenvolverse en la sociedad.
La familia es el primer grupo social que ejerce influencia decisiva en el desarrollo de la conducta de convivencia de los niños y niñas.
Dentro del ámbito de comunicación encontramos los siguientes núcleos:
-Lenguaje verbal: se refiere a la capacidad de relacionarse con los demás recibiendo y produciendo diversos mensajes mediante el uso progresivo y adecuado del lenguaje no verbal y verbal, en sus expresiones oral y escrita. Esto implica avanzar desde los primeros balbuceos y palabras a las oraciones, usándolas para comunicarse según las distintas funciones, en diferentes contextos y con variados interlocutores, además de iniciarse en la lectura y la escritura.
Es importante señalar que al mismo tiempo que los niños adquieren lenguaje, también se van apropiando de la cultura, de los valores y formas de actuar y de hablar, adecuados a determinadas circunstancias. Los niños también aprenderán muchas cosas de las relaciones sociales y de las características de los contextos sociales no solamente por que los padres les instruyen mediante el lenguaje premeditadamente, sino por que observan como los adultos emplean el lenguaje.
-Lenguaje artístico: se refiere a la capacidad creativa para comunicar, representar y expresar la realidad a partir de la elaboración original que hacen los niños desde sus sentimientos, ideas, experiencias y sensibilidad, a través de diversos lenguajes artísticos.
Cuando hablamos de lenguaje artístico, nos referimos a aquellas expresiones vinculadas al campo plástico visual, la música y corporal.
En la educación parvularia lo que se busca es que los niños y niñas puedan familiarizarse con los diferente lenguajes artísticos explorando, experimentando, e improvisando para así desarrollar, a través de un proceso lúdico, la expresión creativa.
Dentro del ámbito de relación con el medio natural y cultural encontramos los siguientes núcleos:
-Seres vivos y su entorno: a través de la relación de los niños y niñas con los seres vivos y su entorno, se pretende favorecer su disposición y capacidad para descubrir y comprender, en forma directa y mediante sus representaciones, las características y atributos de las especies vivientes y de los espacios en que éstas habitan. Se pretende que se desarrollen actitudes indagatorias, la capacidad de asombro y de aprender permanentemente, a través de una exploración activa y conciente según sus intereses de diverso tipo.
Es importante considerar que todo niño o niña se desenvuelve en un entorno especifico que posee y puede asumir diferentes configuraciones, en especial en relación a la intervención que haga el ser humano y que por ser tan propio de nuestro diario vivir se deja de percibir conscientemente, de aprovecharlo como fuente de aprendizajes y también de disfrutarlo.
-Grupos humanos, sus formas de vida y acontecimientos relevantes: se refiere a los diferentes aprendizajes a través de los cuales los niños descubren y comprenden progresivamente las características y sentidos de los grupos humanos, sus formas de vida y organizaciones, en su medio inmediato y habitual y en el ámbito nacional, así como también las creaciones, tecnologías y acontecimientos relevantes que son parte de la historia universal.
En los niños es permanente su curiosidad interés por conocer acerca de algunas situaciones, fenómenos y hechos de la vida. Esta curiosidad unida a las preguntas es una fuente esencial para el aprendizaje y el descubrimiento de las formas de vida de los grupos, de los acontecimientos y creaciones que son parte de ellos.
El medio cercano donde transitan y se desenvuelven los niños es una excelente oportunidad para ampliar su lenguaje y enriquecer su comunicación, a partir de lo que van observando y descubriendo en las calles, tiendas, viajes, etc. Interesa potenciar aquellos aspectos de las realidades que aportan a la identidad de los niños, de sus comunidades y de su país. Aquellos aspectos que contribuyen al conocimiento y valoración de las etnias y de los diversos grupos humanos presentes en el mundo, sobre las formas de organización y de información que tienen, los aportes de sus objetos y creaciones y todas aquellas realidades presentes en la vida social mas que el correcto nombre del fenómeno o situación en si.
-Relaciones lógico-matemáticas y cuantificación: se refiere a los diferentes procesos de pensamiento de carácter lógico matemático a través de los cuales las niñas y niños intentan interpretar y explicarse el mundo. Es aquí también en donde los niños y niñas aprenden las dimensiones de espacio y tiempo, de la aplicación de procedimientos en la resolución de problemas que se presentan en la vida cotidiana.
En síntesis, se busca que los niños desarrollen habilidades matemáticas que posibiliten en forma autónoma, la búsqueda de posibles soluciones a problemáticas que surgen de la vida cotidiana, que confronten soluciones encontradas que busquen diferentes caminos de solución, que formulen nuevos problemas, que comprendan que equivocarse es parte del aprendizaje, es decir, asumir el rol de un investigador que busca permanentemente caminos para resolver situaciones.
· Los Aprendizajes esperados: aquí se expresa qué es lo que se espera que aprendan, estos están expresado en términos de definiciones de lo que deben ser capaces de hacer los niños a mediano plazo; permiten diversas formas de manifestación de los aprendizajes acorde a sus posibilidades y singularidades, condición que es básica en el nivel de a educación parvularia. Estos aprendizajes se presentan divididos en dos ciclos; primer ciclo va desde los primeros meses hasta los tres años, y el segundo ciclo va desde los tres años hasta los seis años o hasta el ingreso a la educación básica. Los primeros aprendizajes que aparecen en los núcleos son para los primeros meses de y los últimos cercanos a los tres años, esto es en el caso del primer ciclo. En el caso del segundo ciclo su ubicación es mas flexible, ya que los niños aquí aprenden según los aprendizajes previos que estos tengan, por esto se hace de vital importancia, un estudio o un diagnostico sobre los conocimientos de los niños y sobre sus ritmos de aprendizaje, todo esto previo a la selección de los aprendizajes esperados a trabajar.
· Las Orientaciones pedagógicas: estas se encuentran luego de los aprendizajes esperados y buscan enfatizar aquellos recursos o medios que son claves para apoyar adecuadamente el logro de los aprendizajes. Las orientaciones enfatizan las actitudes y respectivas acciones que los adultos deben realizar con el fin de generar ambientes propicios para el logro de los aprendizajes esperados, también se menciona la importancia de el uso por parte de la educadora de recursos contextualizados y con sentido para los niños, que permitan que ellos descubran o comprendan el por que de las situaciones de enseñanza que se les ofrece, según sea factible.
Estas orientaciones son en su mayoría de tipo general y abarcan más de un aprendizaje esperado.
y para finalizar cabe destacar que las bases curriculares cuentan también con un capitulo en el cual se encuentran criterios y orientaciones para la planificación, conformación y funcionamiento de las comunidades educativas, recomendaciones para la organización del espacio educativo, organización del tiempo y evaluación. Todo esto con el fin de mejorar y apoyar la labor de la educación parvularia, para poder así facilitar en cierto modo nuestra labor como futuras educadoras de párvulo, para poder entregar una educación de calidad, significativa y pertinente.
Conclusiones
En síntesis cabe mencionar que las bases curriculares de la educación parvularia en un instrumento de apoyo y ayuda para la educación parvularia en general, nos facilita nuestra labor por que nos ofrece la información necesaria que debemos tener presente al momento de planificar nuestras actividades pedagógicas, nos ayuda a comprender cual es la importancia de generar actividades integrales, tomando en cuenta todos los ámbitos de la vida del ser humano y sobre todo aquellos núcleos que cobran mayor relevancia en el nivel inicial, nos presentan una serie de aprendizajes esperados que debemos lograr potenciar en nuestros niños, según las etapas de desarrollo en la que éstos se encuentran, nos entregan criterios de planificación, organización y de evaluación que son esenciales, para que los niños puedan ir desarrollándose adecuadamente y para potenciar todas sus capacidades.
Junto con esto es importante también mencionar los cuadernillos de reflexión pedagógica, en los cuales encontramos cada núcleo de aprendizaje más extenso y con mayores reflexiones en cuanto a la importancia del trabajo de este en el nivel inicial.
bibliografía
MINEDUC, Bases Curriculares de la Educación Parvularia, 2002.
MINEDUC, Cuadernillos de Reflexión Pedagógica, 2002.
Las bases curriculares de la educación parvularia se enmarcan en principios y valores entre los que se inspiran principalmente en la declaración universal de los derechos humanos y la convención de los derechos del niño. Nos presenta el rol de la educadora de párvulos como formadora y modelo de referencia para los niños y niñas, sin dejar de lado la importante labor que realiza la familia en el proceso de educación de sus hijos, ya que es la primera educadora de sus hijos, en donde los niños encuentran sus significados más básicos.
Uno de los objetivos de la educación parvularia es el de favorecer aprendizajes oportunos, pertinentes y con sentido para los niños, que fortalezcan su disposición por aprender en forma activa, creativa y permanente; logrando así un mejor avance en los ámbitos de formación personal y social, la comunicación y la relacion con el medio natural y cultural, para todo esto es fundamental promover el bienestar integral del niño, potenciar la participación de la familia, propiciar un trabajo en conjunto con la comunidad, etc.
Las bases curriculares cuentan con componentes estructurales. Entre los que podemos encontrar:
· Los Ámbitos de experiencia para el aprendizaje, que son tres: formación personal y social, comunicación y relación con el medio natural y cultural. Estos organizan el conjunto de las oportunidades que el currículo parvulario debe considerar en lo sustancial.
Estos tres ámbitos son campos fundamentales de experiencias para toda etapa de la vida humana, a nivel de la educación parvularia adquieren una mayor relevancia dado que es el periodo en el cual se inician y establecen las bases del comportamiento humano y sus primeros aprendizajes.
Formación personal y social: la formación personal y social es un proceso permanente en toda persona que involucra diversas dimensiones interdependientes. Estas comprenden áreas tan importantes como el desarrollo y la valoración del si mismo, la autonomía, la identidad y la convivencia con otros, la pertenencia a una comunidad y a una cultura, la formación valórica. Esta formación se construye sobre la seguridad y confianza básica que comienzan a consolidarse desde el nacimiento, y que dependen en gran medida de la calidad de los vínculos afectivos que se establecen con los padres, la familia y otros adultos que son significativos en la vida de los niños y niñas. La importancia de este ámbito radica en que estamos formando personas que puedan tener autonomía, y lleguen a ser personas independientes con valores y con una identidad propia, personas que puedan desenvolverse de una forma adecuada en la sociedad en la que viven.
Comunicación: la comunicación es el proceso central mediante el cual el niño y la niña desde los primeros años de vida intercambian y construyen significados con los otros. La interacción con el medio, a través de los diferentes instrumentos de comunicación, permite exteriorizar las vivencias emocionales, acceder a los contenidos culturales, producir mensajes y ampliar la comprensión de la realidad. La comunicación tiene diversas formas de manifestarse dentro de las cuales se involucran las capacidades de producir recibir y comprender mensajes, adquiriendo especial significado en el proceso de aprendizaje de los primeros años, ya que ayuda a potenciar las relaciones que los niños establecen consigo mismos, con los demás y con los distintos ambientes en los que participan. La importancia de este ámbito radica en que vivimos en sociedad, somos personas que siempre vamos a estar en contacto con otras personas, lo que hace que la comunicación sea una necesidad, para poder convivir de una forma sana ya que es de vital importancia el poder comunicarnos de una forma adecuada para poder comprender al otro y que el otro nos comprenda.
Relación con el medio natural y cultural: la relación que el niño establece con el medio natural y cultural se caracteriza por ser una relación activa, permanente y de reciproca influencia, es una fuente de constante aprendizaje. Es importante que los niños y niñas logren identificar los distintos elementos del medio, puedan descubrir y comprender las relaciones entre los diferentes objetos, fenómenos y hechos, para explicarse y actuar creativamente distinguiendo el medio natural del cultural. La importancia de este ámbito radica en que el medio natural y cultural es lo que nos rodea, es algo con lo que estamos obligados a convivir somos dependiente de este como este es dependiente de nosotros, por esto es de vital importancia que los niños conozcan su entorno para generar en ellos acciones de respeto y cuidado hacia el medio.
· Los Núcleos de aprendizaje son ocho y corresponden a focos de experiencias y aprendizajes al interior de cada ámbito, estos núcleos representan ejes en torno a los cuales se integran y articulan un conjunto determinado de aprendizajes esperados. Los núcleos constituyen los énfasis centrales que deben ser favorecidos por la educación parvularia en cada ámbito. Cada núcleo contiene un objetivo general en el cual se describe que capacidad de la niña y el niño se espera potenciar.
Dentro del ámbito de formación personal y social encontramos los siguientes núcleos:
-Autonomía: se refiere a la adquisición de una progresiva capacidad del niño para valerse por si mismo en los distintos planos de su actuar, pensar y sentir. Ello posibilita gradualmente su iniciativa e independencia para escoger, opinar, proponer, decidir y contribuir, junto con el asumir gradualmente responsabilidad por sus actos ante si y los demás. Estas capacidades se adquieren con el apoyo de los padres y de sus educadores.
Esta dimensión hace referencia también al conocimiento, valoración y control que los niños van adquiriendo de si mismos y la capacidad de utilizar los recursos personales de los que dispongan en cada etapa. Las interacciones de los niños y niñas con el medio, el creciente control motor, la constatación de sus posibilidades y limitaciones, el proceso de diferenciación de los otros y la cada vez mayor independencia de los adultos, son aspectos fundamentales para el logro de una mayor autonomía.
El espacio físico también es un factor muy importante en la generación de la autonomía para esto es necesario resguardar algunas condiciones que favorecen la autonomía como por ejemplo: la flexibilidad; de manera que vaya cambiando con el tiempo, integrando la participación de los niños en estos cambios, la funcionalidad; que ofrezca a los niños posibilidades de realizar diferentes actividades, la libertad; favorecer un aprendizaje donde los niños puedan expresarse libremente y puedan escoger las actividades que quieran realizar.
-Identidad: se refiere a la gradual toma de consciencia de la niña y el niño de sus características y atributos personales, los que descubren y reconocen una vez logrado el proceso de diferenciación de los otros. Esto les permite identificarse como una persona única, valiosas con características e intereses propios.
Se relaciona con aquellos aprendizajes esenciales para el ser humano que se relacionan con la toma de conciencia de si mismo y que en la infancia se orientan al descubrimiento de las características y atributos personales más representativos.
El desarrollo de la identidad de las personas, depende en gran medida de las percepciones que los adultos tengan de la infancia; en caso de ser positivas y le den importancia a la calidad de sus interacciones con los niños y las niñas desde que nacen, influirán favorablemente en la formación personal armónica y sana de ellos. En este sentido es de gran relevancia que los adultos reconozcan que los párvulos nacen con un repertorio de conductas sensoriales y con capacidades a desarrollar, es decir, que poseen fortalezas con las cuales pueden construir activamente, identidad, autonomía y sentido de pertenencia, aprendizajes necesarios para una convivencia social armónica saludable y fundada en valores.
-Convivencia: se refiere al establecimiento de relaciones interpersonales y formas de participación y contribución con las distintas personas con las que los niños y niñas comparten desde las mas cercanas y significativas hasta las mas lejanas, regulándose por normas y valores socialmente compartidos.
El convivir o vivir con, es un proceso de carácter multidireccional que dura toda la vida y que es necesario aprender desde el momento del nacimiento. El convivir tiene relación con la socialización, ya que es en este proceso donde las personas van adquiriendo formas de actuar y pensar y van desarrollando maneras de sentir que les permiten desenvolverse en la sociedad.
La familia es el primer grupo social que ejerce influencia decisiva en el desarrollo de la conducta de convivencia de los niños y niñas.
Dentro del ámbito de comunicación encontramos los siguientes núcleos:
-Lenguaje verbal: se refiere a la capacidad de relacionarse con los demás recibiendo y produciendo diversos mensajes mediante el uso progresivo y adecuado del lenguaje no verbal y verbal, en sus expresiones oral y escrita. Esto implica avanzar desde los primeros balbuceos y palabras a las oraciones, usándolas para comunicarse según las distintas funciones, en diferentes contextos y con variados interlocutores, además de iniciarse en la lectura y la escritura.
Es importante señalar que al mismo tiempo que los niños adquieren lenguaje, también se van apropiando de la cultura, de los valores y formas de actuar y de hablar, adecuados a determinadas circunstancias. Los niños también aprenderán muchas cosas de las relaciones sociales y de las características de los contextos sociales no solamente por que los padres les instruyen mediante el lenguaje premeditadamente, sino por que observan como los adultos emplean el lenguaje.
-Lenguaje artístico: se refiere a la capacidad creativa para comunicar, representar y expresar la realidad a partir de la elaboración original que hacen los niños desde sus sentimientos, ideas, experiencias y sensibilidad, a través de diversos lenguajes artísticos.
Cuando hablamos de lenguaje artístico, nos referimos a aquellas expresiones vinculadas al campo plástico visual, la música y corporal.
En la educación parvularia lo que se busca es que los niños y niñas puedan familiarizarse con los diferente lenguajes artísticos explorando, experimentando, e improvisando para así desarrollar, a través de un proceso lúdico, la expresión creativa.
Dentro del ámbito de relación con el medio natural y cultural encontramos los siguientes núcleos:
-Seres vivos y su entorno: a través de la relación de los niños y niñas con los seres vivos y su entorno, se pretende favorecer su disposición y capacidad para descubrir y comprender, en forma directa y mediante sus representaciones, las características y atributos de las especies vivientes y de los espacios en que éstas habitan. Se pretende que se desarrollen actitudes indagatorias, la capacidad de asombro y de aprender permanentemente, a través de una exploración activa y conciente según sus intereses de diverso tipo.
Es importante considerar que todo niño o niña se desenvuelve en un entorno especifico que posee y puede asumir diferentes configuraciones, en especial en relación a la intervención que haga el ser humano y que por ser tan propio de nuestro diario vivir se deja de percibir conscientemente, de aprovecharlo como fuente de aprendizajes y también de disfrutarlo.
-Grupos humanos, sus formas de vida y acontecimientos relevantes: se refiere a los diferentes aprendizajes a través de los cuales los niños descubren y comprenden progresivamente las características y sentidos de los grupos humanos, sus formas de vida y organizaciones, en su medio inmediato y habitual y en el ámbito nacional, así como también las creaciones, tecnologías y acontecimientos relevantes que son parte de la historia universal.
En los niños es permanente su curiosidad interés por conocer acerca de algunas situaciones, fenómenos y hechos de la vida. Esta curiosidad unida a las preguntas es una fuente esencial para el aprendizaje y el descubrimiento de las formas de vida de los grupos, de los acontecimientos y creaciones que son parte de ellos.
El medio cercano donde transitan y se desenvuelven los niños es una excelente oportunidad para ampliar su lenguaje y enriquecer su comunicación, a partir de lo que van observando y descubriendo en las calles, tiendas, viajes, etc. Interesa potenciar aquellos aspectos de las realidades que aportan a la identidad de los niños, de sus comunidades y de su país. Aquellos aspectos que contribuyen al conocimiento y valoración de las etnias y de los diversos grupos humanos presentes en el mundo, sobre las formas de organización y de información que tienen, los aportes de sus objetos y creaciones y todas aquellas realidades presentes en la vida social mas que el correcto nombre del fenómeno o situación en si.
-Relaciones lógico-matemáticas y cuantificación: se refiere a los diferentes procesos de pensamiento de carácter lógico matemático a través de los cuales las niñas y niños intentan interpretar y explicarse el mundo. Es aquí también en donde los niños y niñas aprenden las dimensiones de espacio y tiempo, de la aplicación de procedimientos en la resolución de problemas que se presentan en la vida cotidiana.
En síntesis, se busca que los niños desarrollen habilidades matemáticas que posibiliten en forma autónoma, la búsqueda de posibles soluciones a problemáticas que surgen de la vida cotidiana, que confronten soluciones encontradas que busquen diferentes caminos de solución, que formulen nuevos problemas, que comprendan que equivocarse es parte del aprendizaje, es decir, asumir el rol de un investigador que busca permanentemente caminos para resolver situaciones.
· Los Aprendizajes esperados: aquí se expresa qué es lo que se espera que aprendan, estos están expresado en términos de definiciones de lo que deben ser capaces de hacer los niños a mediano plazo; permiten diversas formas de manifestación de los aprendizajes acorde a sus posibilidades y singularidades, condición que es básica en el nivel de a educación parvularia. Estos aprendizajes se presentan divididos en dos ciclos; primer ciclo va desde los primeros meses hasta los tres años, y el segundo ciclo va desde los tres años hasta los seis años o hasta el ingreso a la educación básica. Los primeros aprendizajes que aparecen en los núcleos son para los primeros meses de y los últimos cercanos a los tres años, esto es en el caso del primer ciclo. En el caso del segundo ciclo su ubicación es mas flexible, ya que los niños aquí aprenden según los aprendizajes previos que estos tengan, por esto se hace de vital importancia, un estudio o un diagnostico sobre los conocimientos de los niños y sobre sus ritmos de aprendizaje, todo esto previo a la selección de los aprendizajes esperados a trabajar.
· Las Orientaciones pedagógicas: estas se encuentran luego de los aprendizajes esperados y buscan enfatizar aquellos recursos o medios que son claves para apoyar adecuadamente el logro de los aprendizajes. Las orientaciones enfatizan las actitudes y respectivas acciones que los adultos deben realizar con el fin de generar ambientes propicios para el logro de los aprendizajes esperados, también se menciona la importancia de el uso por parte de la educadora de recursos contextualizados y con sentido para los niños, que permitan que ellos descubran o comprendan el por que de las situaciones de enseñanza que se les ofrece, según sea factible.
Estas orientaciones son en su mayoría de tipo general y abarcan más de un aprendizaje esperado.
y para finalizar cabe destacar que las bases curriculares cuentan también con un capitulo en el cual se encuentran criterios y orientaciones para la planificación, conformación y funcionamiento de las comunidades educativas, recomendaciones para la organización del espacio educativo, organización del tiempo y evaluación. Todo esto con el fin de mejorar y apoyar la labor de la educación parvularia, para poder así facilitar en cierto modo nuestra labor como futuras educadoras de párvulo, para poder entregar una educación de calidad, significativa y pertinente.
Conclusiones
En síntesis cabe mencionar que las bases curriculares de la educación parvularia en un instrumento de apoyo y ayuda para la educación parvularia en general, nos facilita nuestra labor por que nos ofrece la información necesaria que debemos tener presente al momento de planificar nuestras actividades pedagógicas, nos ayuda a comprender cual es la importancia de generar actividades integrales, tomando en cuenta todos los ámbitos de la vida del ser humano y sobre todo aquellos núcleos que cobran mayor relevancia en el nivel inicial, nos presentan una serie de aprendizajes esperados que debemos lograr potenciar en nuestros niños, según las etapas de desarrollo en la que éstos se encuentran, nos entregan criterios de planificación, organización y de evaluación que son esenciales, para que los niños puedan ir desarrollándose adecuadamente y para potenciar todas sus capacidades.
Junto con esto es importante también mencionar los cuadernillos de reflexión pedagógica, en los cuales encontramos cada núcleo de aprendizaje más extenso y con mayores reflexiones en cuanto a la importancia del trabajo de este en el nivel inicial.
bibliografía
MINEDUC, Bases Curriculares de la Educación Parvularia, 2002.
MINEDUC, Cuadernillos de Reflexión Pedagógica, 2002.
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